Llamadme ñoña, pero perderse una semana (o un mes) en unas cabaña como éstas a mí me parece un plan idílico. En mitad del campo, con vistas al mar y situada en la Isla de Wight, al sur de Inglaterra, a mí ya sólo el exterior me parece sacado de un cuento; pero el interior tampoco se queda atrás. Mobiliario vintage, puertas y ventanas de cuarterones, jarrones con flores, paredes de madera pintada y tejidos en tonos azules que nos recuerdan que el mar está muy cerca.
Una decoración estilo cottage o country chic, en el que el ambiente rústico se ve suavizado por un romanticismo sutil.
Esta sala con el escritorio debajo de la ventana es quizás lo que más me ha gustado, aunque el porche con la terraza a los pies del agua es para ir y empadronarse :)
Con solo ver las imágenes ya me he relajado, y como soñar es gratis...
¡Nos leemos!
Imágenes: El jardín de los muffins
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